Los utensilios de cocina de cobre forrados de estaño se limpian maravillosamente y durarán varias vidas con un poco de atención. La lata se oscurece, se endurece ligeramente y se suaviza con el tiempo y el uso, todo lo cual mejora el rendimiento de una sartén.
Si prefiere un aspecto brillante, puede iluminar un revestimiento de estaño con la siguiente técnica galvánica simple. Este proceso es completamente no tóxico y seguro para los alimentos, y asume que la lata se ha limpiado de residuos de alimentos antes de comenzar.
La receta para una cacerola de cobre forrada de estaño de 3 cuartos:
- Llenar la sartén hasta el borde con agua y llevar a ebullición.
- Retire la sartén del fuego y agregue:
- 1 Cucharada de bicarbonato de sodio (bicarbonato de sodio)
- 1 Cucharada de sal de mesa no yodada
- Haga una almohadilla de cuatro pliegues de papel de aluminio del tamaño aproximado de la parte inferior de su sartén.
- Sumerge el papel de aluminio en la sartén con un tazón pequeño de cerámica o pyrex para mantenerlo en su lugar. No use un recipiente de metal ni utensilios, ya que interrumpen el proceso galvánico.
- Deje reposar durante un mínimo de 15 minutos, solo para asegurarse de que se ha dado cuenta de todo el potencial de la reacción. El signo revelador del éxito es el re-brillo de la lata. Una vez que esté satisfecho, retire el papel de aluminio y lave la sartén con agua y jabón. Cualquier mancha que no se transfiera a la lámina se limpiará fácilmente.
¿por Qué funciona esto?
El estaño oxidado es el cátodo (polo negativo) en esta reacción, y el aluminio es el ánodo (polo positivo). La corriente de luz (literalmente electrones que fluyen) creada de negativo a positivo transfiere óxidos metálicos en el lado de estaño saliente al lado de aluminio entrante, de modo que el estaño se iluminará y el aluminio se oscurecerá. Se puede ver la transferencia de óxido de la sartén al papel de aluminio.
La bandeja del ejemplo tardó de 10 a 12 minutos en iluminarse notablemente. Simplemente puede vaciar la sartén y limpiarla con un paño limpio, o bañarla con agua tibia y jabón. ¡Voila!
Observe en las fotos que hay una línea distinta entre el estaño desoxidado (abajo)y el estaño oxidado (arriba), ¡hecho para que pueda ver la diferencia! Llenar la bandeja hasta el borde proporciona una cobertura galvánica completa.