Una brillante campaña de marketing de Sinclair Oil Corporation probablemente no ayudó en la situación. En 1933, Sinclair patrocinó una exposición de dinosaurios en la Feria Mundial de Chicago. Su campaña declaró que las reservas de petróleo del mundo se formaron durante la época en que existieron los dinosaurios. La exhibición resultó ser un éxito, con la compañía confeccionando un logotipo con un Apatosaurio (anteriormente conocido como Brontosaurio) como mascota. Más tarde, cuando los científicos produjeron evidencia fáctica de dónde proviene el combustible, los puntos de vista de la gente cambiaron. La marca sigue existiendo hoy en día, con el prominente logotipo verde y rojo siendo uno de los iconos más reconocidos en Estados Unidos. Entonces, esto lleva a la pregunta: ¿De dónde vienen los combustibles fósiles, específicamente el carbón?
Hace millones de años, la tierra estaba cubierta de vastas áreas de vegetación tipo pantano. Cuando esta vegetación llegó al final de su ciclo de vida, cayó naturalmente en los pantanos y depósitos de agua naturales. Debido a la falta de oxígeno, el proceso de descomposición se detuvo, preservando así la vegetación. Con los años, el asunto se comprimió y causó una acumulación de presión. Con la presión viene el calor, estos dos factores causan un cambio físico y químico. Esto transformó la vegetación en turba. Durante muchos más millones de años, esta sustancia similar a la turba se forma en lignito y luego en carbón. ¡Ahí lo tienes! Por lo tanto, contrariamente a la creencia popular, los dinosaurios no son la fuente de lo que alimenta nuestra vida cotidiana.