En el contexto económico de la industria petrolera, la limpieza de pozos a través de instalaciones de producción en superficie es una opción para minimizar el impacto ambiental, economizar días de perforación y comercializar el petróleo de limpieza producido. Las operaciones de limpieza a través de instalaciones de producción en la parte superior de la costa comenzaron a realizarse hace algunos años. Sin embargo, se deben considerar muchos riesgos, especialmente los riesgos químicos de producción relacionados con la compatibilidad entre los fluidos de perforación/terminación y de producción. El objetivo es garantizar la estabilidad del proceso y la calidad final del aceite y del agua producida que, en muchos casos, debe cumplir con especificaciones rigurosas para la descarga costera o la reinyección en el depósito.
Este estudio muestra la metodología desarrollada para evaluar los riesgos de separación y depósitos. Como observación general, los experimentos realizados muestran una degradación del proceso de separación cuando se agregan fluidos de perforación/terminación (salmueras de terminación y partículas de CaCO3 de lodos de perforación) a la emulsión. La hipótesis más probable es que algunas partículas sólidas se adsorberán en la interfaz aceite-agua y afectarán la estabilidad de las emulsiones. Sin embargo, los aditivos que cambian la humectabilidad de los sólidos parecen mejorar la separación, asegurando una eficiencia de separación equivalente al sistema sin partículas.
En el caso de aceites que contienen ácidos nafténicos de muy alto peso molecular (TPA), el uso de salmueras con cloruro de calcio aumenta el riesgo de depósitos de sal nafténica en las instalaciones de superficie. También se observó la degradación de la calidad del agua y se requiere la optimización de un demulsante inverso.
La estrategia de limpieza final también debe adaptarse al diseño de la parte superior y a las posibilidades de manejar fluidos de perforación. Cómo separar y recuperar los escombros podría ser un problema para los campos marrones. En el caso de los proyectos nuevos, pueden incluirse algunas disposiciones adicionales en el diseño para la limpieza de pozos. En cualquier caso, siempre es necesaria una evaluación multidisciplinaria del riesgo para garantizar el buen desarrollo de este tipo de operaciones.