Salvador, he estado al tanto de lo que viene aconteciendo contigo y tu familia, la perdida de un ser querido deja un dolor inmenso difícil de comprender, tu madre, mi madre y todas las mamás del mundo son y serán de los más grandes seres que puedan existir ya que nos dieron la vida, la protección, los principios, las pautas básicas para sobrevivir en este bello mundo, Además de escucharnos en los duros momentos por los que pasamos a lo largo de la vida. Mis deseos en estos difíciles días que sé debes estar pasando es que más qué tristeza y desolación sientas alegría y agradecimiento por el maravilloso ser que compartió la vida contigo, por qué dejo el ti y tus demás familiares recuerdos imborrables.
Ella dejó en ti un legado que estará por siempre en el corazón de tu familia y tuyo por siempre para que Unidos lo entiendan y aprovechen el resto el tiempo que les quede, siendo comprensivos los unos con los otros, tratando de amarse como debe ser.
Quiero cerrar este noble mensaje con la intención de que sepas que aunque estoy lejos de ti, te acompaño en la distancia para sobrellevar estos días. Un fuerte abrazo y mi más sinceras condolencias. Con aprecio.
Cristian