Amor, hoy quiero decirte, que ya no hay más dudas, nada más que pensar, estoy tan segura de ti, tan segura de quiero que seas el hombre de mi vida, porque a tu lado he encontrado todo lo que le hace falta a mi vida. Eres el hombre ideal, el hombre perfecto, la criatura más hermosa que Dios ha puesto en mi camino.
Me encantas y me gusta todo de ti, y quiero que tú seas el hombre de mi vida porque en ti encuentro cariño, dulzura, comprensión, sinceridad y porque te vuelves un niño cuando estás conmigo.
Me encanta todo de ti, tus besos, tus caricias, tu mirada, tu piel, tu aroma, como me llevas la contaría, lo terco que llegas a ser algunas veces… hasta tu forma de enojarte.
Quiero que seas el hombre de mi vida, porque sé que si formamos una familia, le brindarás a nuestros hijos todo el amor que me brindas a mí, serás así de cariñoso, responsable, comprensivo, complaciente. Sé que les darás los mejores consejos, pero lo más importante es que serás un excelente ejemplo para ellos.
Quiero que seas el hombre de mi vida, porque cuando seamos viejecitos, y ya no seas tan coqueto y tan apasionado, tu calor, tu protección, tu compresión, la confianza, y las charlas largas, un café, una cena y lo más importante «tu compañía» será lo único que necesitaremos y que nos mantendrá unidos.
Por ahora deseo que juntos disfrutemos nuestra juventud, acabar cansados de reír y bailar. También pienso que pueden venir tiempos difíciles, pero nuestro amor los superará. Pídeme lo que quieras y lo prometo que lo seré por ti. Seré tu protección o tu protegida, tratare de ser fuerte y fortalecerte, tratare de ser dulce para que tú puedas descansar y confiar en mi… y todo esto… solo por una razón… porque te amo.
Elizabeth
Agradecemos a Elizabeth esa hermosa carta de amor.