Obtener una Discapacidad del Seguro Social o SSI para Problemas de Dolor en las articulaciones

El dolor en las articulaciones es muy común; hasta un tercio de los adultos sufren de dolor en las articulaciones en un momento dado. Los lugares típicos para el dolor articular incluyen las rodillas, los hombros, el cuello, las caderas, los codos, las muñecas y los tobillos. La gravedad del dolor articular varía desde un dolor leve hasta un dolor inmovilizador, y puede durar unas pocas semanas (agudo) o meses o años (crónico). Debido a que usa las articulaciones (el lugar donde se encuentran dos huesos) cada vez que mueve cualquier parte de su cuerpo, el dolor articular intenso puede ser muy incapacitante.

El dolor en las articulaciones tiene muchas causas, como lesiones, inflamación, edad, infección y cáncer. Los diagnósticos médicos asociados con el dolor articular incluyen osteoporosis, artritis, fibromialgia, bursitis, lupus y gota.

¿Puede obtener Seguro Social por Discapacidad o SSI para Dolor en las Articulaciones?

Si bien es posible calificar para la Discapacidad del Seguro Social o el Seguro de Ingreso Suplementario (SSI) como resultado de su dolor articular crónico, rara vez es fácil.

Para calificar para beneficios por incapacidad, primero debe demostrar a la Administración del Seguro Social que no está haciendo un trabajo sustancial y que tiene un impedimento grave «médicamente determinable» que durará por un período continuo de no menos de un año. Por lo tanto, para obtener beneficios por discapacidad para el dolor articular, primero debe buscar un diagnóstico y tratamiento de profesionales médicos y establecer que tiene un impedimento continuo. En otras palabras, si solicita una discapacidad debido a un dolor intenso en una articulación, no se le considerará para recibir beneficios a menos que se le hagan radiografías, resonancias magnéticas o pruebas de laboratorio que demuestren que tiene una discapacidad física que se podría esperar razonablemente que produzca sus síntomas.

Si ha cumplido con estos requisitos iniciales, el Seguro Social evaluará si su discapacidad califica para recibir beneficios por discapacidad. Puede calificar para beneficios por discapacidad de una de dos maneras: (1) al demostrar que su discapacidad cumple o es igual a los requisitos del libro azul del Seguro Social, la lista de discapacidades que califican automáticamente para beneficios; o (2) al demostrar que su discapacidad causa limitaciones físicas y/o mentales que le impiden trabajar a tiempo completo.

Cómo el Dolor Articular Puede Calificar Bajo una Lista de Libro Azul

Para calificar bajo la lista del Seguro Social para disfunción articular, su dolor articular debe estar asociado con una deformidad en una articulación. Para cumplir con este listado, las imágenes médicas (como una resonancia magnética) deben mostrar un estrechamiento del espacio articular, anquilosis (cuando las articulaciones se fusionan) o la destrucción del hueso. También debe tener antecedentes de dolor y rigidez articular y pérdida de movimiento en la articulación.

Si la deformidad se encuentra en la articulación de la cadera, la rodilla o el tobillo, debe impedirle caminar lo suficientemente bien como para llevar a cabo las actividades normales de la vida diaria. La incapacidad de caminar lo suficiente significa que necesita un andador, dos muletas o dos bastones; no puede usar el transporte público estándar; no puedes hacer compras ni hacer otros recados sin la ayuda de alguien; o no puedes subir unos cuantos escalones a un ritmo razonable con el uso de un pasamanos.

Si la deformidad está en el hombro, el codo, la muñeca o la mano, debe estar en ambos brazos y debe dificultar tanto el uso efectivo de las manos que necesite la ayuda de otra persona para las actividades diarias, como preparar una comida, alimentarse, cuidar la higiene personal o clasificar y manipular papeles o archivos.

Para calificar en este listado, deberá asegurarse de que las notas de su médico incluyan exactamente cómo lo limitan sus problemas articulares (sus «limitaciones funcionales») y que sus registros contengan los resultados de imágenes médicas apropiados.

El libro azul también incluye otros listados que están asociados con el dolor articular crónico. Para obtener más información sobre el cumplimiento de los requisitos de estos listados, consulte nuestros artículos sobre estos impedimentos:

  • artritis inflamatoria o reumatoide
  • lupus
  • osteoartritis de la columna vertebral, o
  • cirugía de cadera.
También puede calificar para beneficios por discapacidad por uno de estos impedimentos al demostrar que su dolor articular es médicamente equivalente a uno de estos listados.

Calificación Basada en la Capacidad Funcional Residual

Muchos diagnósticos asociados con dolor articular no se enumeran específicamente en el libro azul. Por ejemplo, no hay listados de los siguientes problemas específicos relacionados con las articulaciones:

  • enfermedad degenerativa de las articulaciones o artritis
  • fibromialgia
  • bursitis
  • problemas de cadera
  • problemas de cuello
  • problemas de hombro
  • Síndrome de Fatiga Crónica
  • gota.
Si tiene uno de los diagnósticos anteriores, deberá demostrar al Seguro Social que su capacidad para funcionar es tan limitada que no puede trabajar a tiempo completo. El Seguro Social determina si su discapacidad le impide trabajar a tiempo completo al realizar una evaluación de «capacidad funcional residual» o «RFC». El RFC es una medida de su capacidad para trabajar después de tener en cuenta sus deficiencias físicas y mentales. Para obtener información completa sobre cómo calificar para beneficios por discapacidad bajo una evaluación de RFC, visite el enlace de arriba que está más relacionado con su dolor articular.

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