Actualización CITES 2019 * Fuente: Fender / CITES
Es oficial: ¡Las normas CITES ya no se aplicarán a los instrumentos musicales de palo de rosa usados! Se ha fijado la fecha de finalización: 26 de noviembre de 2019.
Por último, una fecha de finalización oficial de las regulaciones CITES sobre palo de rosa para la industria de la música. Desde el día en que se implementó, la CITES no causó más que dolores de cabeza a la industria de los instrumentos musicales. Los músicos corrían el riesgo de perder sus guitarras (o al menos partes de ellas) a manos de los funcionarios de aduanas. Ahora por fin ha terminado y el mundo de la guitarra por fin puede respirar un suspiro de alivio.
CITES – ¿Por fin se acabó? ¿Puedo viajar con mi Telecaster de palo de rosa ahora? Oh, sí!
¡Por fin es oficial!
Aquí hay un extracto de la declaración de NAMM sobre el anuncio:
Hoy, la CITES (Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres) emitió una notificación oficial en la que se indica que la fecha efectiva para la exención de instrumentos musicales del requisito de permisos para dalbergia es el 26 de noviembre de 2019.
también contiene definiciones aplicables a la exención. Como se señaló al aprobarse la Anotación 15, las importaciones y exportaciones de instrumentos musicales terminados, piezas terminadas y accesorios terminados ya no necesitarán un permiso CITES. La excepción se aplica a todas las especies de dalbergia, excepto el palo de rosa brasileño, que sigue figurando en el Apéndice I de la CITES. Como mejor práctica, las empresas Miembros del MNAM deben seguir trabajando con las Autoridades Administrativas de sus países de exportación/importación para garantizar el cumplimiento.
Esta exención a las regulaciones CITES para el palo de rosa es una buena noticia para cualquier persona que viaje con instrumentos musicales que utilicen dalbergia y, por supuesto, para todos los fabricantes de instrumentos de todo el mundo. Ahora, por fin, todos podemos volver a hacer música y no preocuparnos por perder nuestras preciadas guitarras en la aduana.