Las células cancerosas de próstata, al igual que muchos tipos de cáncer (especialmente de mama), tienen un sistema metabólico diferente al de las células sanas. Las células sanas utilizan principalmente oxígeno para producir energía, que también requiere una gran cantidad de la molécula conocida como citrato. Las células cancerosas de próstata no lo hacen; en su lugar, usan un sistema que no requiere oxígeno y no usa citrato, sino colina (Johansson, et al. 2009). Evitar los alimentos con alto contenido de colina puede ser importante para reducir el riesgo de que el cáncer de próstata existente empeore o sea más agresivo.
Hay muchas técnicas de diagnóstico por imágenes que aprovechan este hecho para buscar cáncer de próstata en todo el cuerpo, incluso lo que se conoce como espectroscopia de resonancia magnética (una forma elegante de resonancia magnética) y prueba de emisión de positrones (PET) que utiliza colina radiactiva (Scheenen, et al. 2004). Esta es una prueba más de la importancia de la colina para las células cancerosas de próstata, y por qué evitarla en la dieta podría ser una buena idea.
En dos grandes ensayos epidemiológicos se examinó la relación entre los alimentos con alto contenido de colina y el agravamiento del cáncer de próstata (Richman, et al. 2012 y 2010). El consumo elevado de huevos y pollo se relacionó en particular con un mayor riesgo de que los hombres que ya tenían cáncer de próstata desarrollaran una enfermedad agresiva (como lo demuestra el hecho de que el cáncer se propague o los mate, entre otros resultados negativos). Estos estudios se realizaron de forma prospectiva, lo que es fuerte, pero no fueron ensayos clínicos aleatorios, por lo que no pueden probar definitivamente que fue la colina o los alimentos que los contienen lo que causó. Es importante tener en cuenta que hasta ahora, nadie ha demostrado que la colina aumente el riesgo de contraer cáncer de próstata en primer lugar, esto realmente se trata de empeorar el cáncer existente.
Durante muchas décadas, los expertos en medicina natural han abogado por una dieta más vegetariana para los hombres con cáncer de próstata. Esto se basó en una investigación que mostró que las dietas altas en productos animales (excepto el pescado) tendían a causar y empeorar el cáncer de próstata, y que las dietas vegetarianas eran útiles (Ornish, et al. 2005). Mientras que mucho esfuerzo se centró en carnes rojas, carnes en conserva (fiambres, salchichas, tocino, etc.) y carnes quemadas (ya que el proceso de combustión crea muchos carcinógenos), ahora está cada vez más claro que las aves de corral y los huevos pueden ser igual de malos, si no peores.
Los alimentos ricos en colina más altos son:
yemas de Huevo (las claras de huevo son bellas)
carnes de Órganos
germen de Trigo
Pollo
carne de Cerdo
Carne
leche de Vaca y productos relacionados (mantequilla, yogurt, etc.)
Se insta a los hombres con cáncer de próstata a comer lo que se conoce como dieta pescovegan (sin productos de origen animal, excepto pescado; sin azúcares simples; la mayoría de los alimentos de la dieta deben ser verduras, frutas, nueces y legumbres) la mayor parte del tiempo en función de la totalidad de la información existente. Se deben evitar los suplementos que contengan colina o fosfatidilcolina. Esta información no es perfecta y estudios adicionales podrían debilitar esta recomendación, pero por ahora parece el mejor consejo. Todo hombre debe consultar con su experto en medicina natural que conozca el cáncer de próstata y la nutrición para determinar si esta dieta es óptima para ellos. Los hombres que están perdiendo mucho peso con cáncer avanzado, en particular, pueden no tener un buen desempeño con una dieta como esta. Pero la mayoría de los demás lo harán, incluso si solo pueden seguirlo algunos de los días de la semana y no todos.
Johansson M, Van Guelpen B, Vollset SE, et al. (2009) «One-carbon metabolism and prostate cancer risk: Prospective investigation of seven circulating B vitamins and metabolites» Biomarcadores epidemiológicos del cáncer Prev 18 (5):1538-43.
Ornish D, Weidner G, Fair WR, et al. (2005)» Intensive lifestyle changes may affect the progression of prostate cancer » J Urol 174 (3): 1065-9; discusión 1069-70.
Richman EL, Kenfield SA, Stampfer MJ, et al. (2012)» Ingesta de colina y riesgo de cáncer de próstata letal: Incidencia y supervivencia » Am J Clin Nutr 96 (4): 855-863.
Richman EL, Stampfer MJ, Paciorek A, et al. (2010) «Ingakes of meat, fish, poultry, and eggs and risk of prostate cancer progression» Am J Clin Nutr 91 (3):712-21.
Scheenen TW, Klomp DW, Roll SA, et al. (2004) «Fast acquisition-weighted three – dimensional proton MR spectroscopic imaging of the human prostate» Magn Reson Med 52:80-88.