(1739 – 1799)
Dittersdorf recibió lecciones de composición de Giuseppe Bonno en su Viena natal y sirvió como violinista en la orquesta del Príncipe de Sajonia-Hildburghausen, antes de unirse al teatro imperial. Luego se desempeñó como Maestro de Capilla del obispo de Grosswardein, donde, en 1762, sucedió a Michael Haydn. En 1769 se convirtió en Maestro de Capilla del Príncipe-Obispo de Breslau, en este período adquiriendo la patente de nobleza que añadía al nombre de Ditters el honorífico ‘von Dittersdorf’. Las condiciones en Johannisberg, la sede del Príncipe-Obispo, se deterioraron en las circunstancias políticas de la época, y a la muerte de su empleador en 1795 se mudó con su familia para unirse a la casa de un noble en Bohemia. Antes de su muerte dictó su fascinante autobiografía a su hijo, un vívido relato de la vida musical de su época.
Obras escénicas
Dittersdorf escribió un gran número de obras escénicas. Las primeras obras italianas escritas para Johannisberg fueron seguidas por una serie de Singspiel principalmente para Viena, y otras 11 obras de este tipo en 1793 y 1794 para el duque Federico Augusto de Brunswick-Oels. Estos, en general, marcan una etapa importante en el desarrollo de la forma.
Música Vocal y Coral
Dittersdorf hizo su debida contribución al oratorio en cuatro de estas obras. Escribió escenarios de la Misa y otras obras litúrgicas, así como cantatas y arias para uso de la iglesia. Sus obras vocales seculares son pocas.
Música orquestal
En música orquestal, Dittersdorf puede compararse en algunos aspectos con su casi contemporáneo Joseph Haydn. Sus 120 sinfonías enumeradas incluyen un conjunto de seis que dan expresión musical a las Metamorfosis de Ovidio y otra nel gusto di 5 nazioni («en el gusto de las cinco naciones»). Sus conciertos, bastante menos numerosos, incluyen 18 para violín, cinco para viola, uno para violonchelo y uno para contrabajo, así como un Concierto Doble para viola y contrabajo.
Música de cámara
La música de cámara de Dittersdorf, con toda la claridad del estilo clásico, incluye cuartetos y quintetos de cuerda, divertimentos y composiciones para grupos de instrumentos de viento.